Hoy mi boca sabe a ti, a tus besos,
a tu amor, a pan blanco.
Tu nombre en mis labios suena
a melancolia, a lejano, a perdido...
No puedo amarte, no debo amarte.
La intensidad de mi pecado
me hace merecedor de mi propio desprecio,
no soy, al fin, lo que mereces,
no puedo ser tuyo y frenar tu vida con mi peso...
mi condena es cruel pero necesaria: amarte en vano
y para siempre, renunciar a ti para ser mejor y quizas
un dia merecer tu amor,
Se que no lo entiendes... Tal vez algún dia venza
los miedos que me encogen y alumbre tu alma
para suplicar tu perdón.
Juan Carlos
1 comentario:
Juan Carlos,este comentario .verso ,canción,no sólo me hizo llorar,me trajo aún una latente situación......reconocer que aunque triste tus palabras,apoyuado con esta música,logra que deje de teclear apoyar mi cara en las palmas de mis manos,y pensar,y quedarme colgada de unos puntos suspenmsivops que tiene aroma a punto aparte.....
Un abrazo..
Mariella
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