Doblan El Cabo

viernes, 16 de mayo de 2008

ESTAS

Por fin he sabido de ti. Me has tenido en la oscuridad más absoluta diez días. He pensado de todo. Se ha fugado con un marinero. Le toco una loto y desapareció. Le hicieron las dichosas pruebas y la han ingresado. Llegué a pensar (el lunes pasado, creo que fue, de madrugada… ) que habías desaparecido de mi vida para siempre, que ya no volvería a oír tu voz de pan nunca mas… y lloré como sólo llora un niño, desconsoladamente.

Ayer apareciste explicando tu escapada de niña autista (me gustó la frase, ya sabes como soy) con un enfoque de libertad que nadie nunca te ha negado, ni cuestionado, ni medido. Y con un “tu me enseñaste a escapar” de niña soleta, redicha y remilgada, justificaste lo injustificable: la ausencia de noticias.

Pero te costará discutir conmigo. Ahora ya soy feliz. Feliz de saber que estas bien, que lates, que existes, que me hablas… Eso es todo lo que me importa. Desaparece cuanto quieras, sólo quiero saber que estás ahí.

A mi lado, como siempre


3 comentarios:

Anónimo dijo...

Hola mi niño!
Me encanta lo que escribiste.

Tengo un problema para entrar....me olvidé la contraseña y donde la puse.

Socorrooooo

Besos corazón!

Nanny Ogg (Dolo Espinosa) dijo...

A veces es lo único que hace falta: saber que ese alguien está ahí :)

Besos

Mujer. dijo...

Estar que importante es estar...aunque a mi personalmente me cuesta entender que alguién se desconcete y no de aviso de desconexxión ...a quién le reclama el corazón que necesita esa luz??....no entiendo el amor asi...pero es más frecuente amar asi con desconecciones de lo que yo creía.....aprendere a desconcetarme a ver si recibo una bienvvenida tan hermosa como la tuya..